El intendente Federico Achával volvió a destacar la importancia histórica que representa para el distrito que la Cámara de Diputados de la Nación haya aprobado el proyecto de creación de la Universidad Pública de Pilar.
Con 139 votos a favor, 75 en contra y una abstención, el texto, tras casi un dos años y medio de ser presentado, recibió el visto bueno, y ahora debe ser avalado por el Senado para que se convierta en ley.
Achával estuvo presente en el recinto de la cámara baja, donde siguió de cerca la sesión que, aseguró, será un hito para Pilar.
“La verdad que fue un día con mucha emoción, digamos, se me vinieron a la mente un montón de noches o de tiempo dedicado a pensar y planificar y armar y darle contenido al proyecto y la idea de la Universidad Nacional de Pilar. Obviamente también se me vino a la mente un montón de pilarenses que desde su lugar aportaron al conocimiento de cómo tenía que estructurarse, la cantidad de compañeros y compañeras que estuvieron buscando las más de 50.000 firmas que apoyaron la universidad. Y durante el día, no puedo negar, un poco de ansiedad de ir contando el poroteo de los diputados, más teniendo en cuenta las experiencias anteriores en las que habíamos llegado a recinto pero sin quórum”, expuso Achával en una entrevista con el programa Agenda propia (105.9).
-¿Temiste en algún momento que no alcanzaran las manos para votarla?-, preguntó Agenda.
-Hicimos un enorme trabajo desde la última vez a hoy de persuadir, de convencer, de explicar, de tratar de tender puentes que es un poco lo que entendíamos que era necesario, no solamente para la universidad sino para tratar de construir una Argentina que apueste realmente a la educación pública y apueste al derecho a la universidad para todos y para todas. Y creo que en eso teníamos mucha confianza, que habíamos logrado tender esos puentes. Después, por el otro lado, creo que hay un gran trabajo de Cecilia Moreau, de Paula Penaca, de un montón de diputadas que estuvieron dando, digamos, el trabajo más minucioso en el Congreso y, por supuesto, también un impulso muy grande de Sergio Massa, de Máximo Kirchner, de un montón de los referentes en nuestro espacio político para tratar de llegar un poco más tranquilo a la sesión-, explicó el intendente.
-¿Cómo viste el debate, con cada uno de los legisladores que iba hablando y exponiendo su postura? Donde algunos apoyaban, pero otros no.
-Celebrando primero el quórum y muy atento a eso porque, obviamente, cada diputado que se levantaba para ir al baño a mí me ponía nervioso. Escuchando con mucho respeto las distintas opiniones, alegrándome mucho con aquellos que apoyaban realmente de fondo la idea de las universidades nacionales. No solamente la de Pilar, sino que todas las que estaban en votación. Por supuesto, adhiriendo a los discursos que apuestan a que la Argentina sale adelante con más universidades, brindando mayor accesibilidad al derecho a la universidad para todos y para todas. Fundamentalmente, aquellos que, además, se habían tomado el trabajo de leer nuestras propuestas y obviamente, no coincidiendo, respetuosamente, en el modelo de esa Argentina que cree que todo está mal y que, como está mal, se busca la excusa para no avanzar en cuestiones muy concretas, muy reales, que tienen que ver con el desarrollo futuro de Pilar y de las demás localidades, como es la creación de las universidades.
-¿Y esos 20 segundos de votación, como los viviste?
-Con muchísima intensidad, por suerte, con muchos compañeros y compañeras que también estaban en los balcones y estaban afuera también esperando, imaginándome la importancia que tiene para Pilar. Una vez que pasamos este paso, tenemos que ir por los próximos y tenemos que pensar en que la universidad realmente, en algún momento, funcione. Como le decía a mis compañeros ayer, yo sueño con ese momento en el que un pibe entra caminando a la Universidad Nacional de Pilar y a partir de ahí se le abre un mundo de conocimiento, de posibilidades, de distintas trayectorias de vida para nosotros. Crear una universidad tiene que ver con el desarrollo humano integral, tiene que ver con el desarrollo con inclusión del distrito, tiene muchísimos componentes y todo eso se me pasó por la cabeza en los 20 segundos.
-¿Cómo fue el tránsito desde diciembre del año pasado, cuando en dos oportunidades se intentó llevar el proyecto al recinto? Conforme iba pasando este año parecía que se iba alejando cada vez más.
-Sabiendo que no podíamos bajar los brazos y entendiendo que parte importante de la política tiene que ver con generar consensos, con persuadir, con convencer, con llevar argumentos. La verdad que fuimos muchos los que trabajamos en ese sentido y con la posibilidad de plantear cuestiones concretas y sacar fantasmas y explicar qué tiene que ver la universidad que estamos proponiendo. Crear con el desarrollo real, con inclusión del distrito, que vimos las necesidades que tiene Pilar, las potencialidades que tenía el distrito, llenando de argumentos un poco la idea de la creación y tratando de animar esas cuestiones que, lamentablemente, por cuestiones electorales y muchas veces partidarias, no logramos unificar. Y me parece que de eso se trató el trabajo en este último tiempo. Vale la pena remarcar el enorme trabajo que hizo Sergio Massa para que esto sea una realidad, lo mismo que Máximo Kirchner o, digamos, haber logrado convencer a un sector del peronismo federal de (Alejandro) “Topo” Rodríguez o una parte de Evolución (Radical) por la necesidad también de la creación de la Universidad de Río Tercero. Yo creo que eso construye un poco la Argentina que nosotros entendemos que tiene que suceder, una Argentina de unidad nacional en base particularmente a cuestiones que nos pongan de acuerdo, como la necesidad de trabajo y educación para todos y todas.
-Decías recién que te gustaría ver a los primeros alumnos que se reciben. ¿Cómo sigue? Ahora obviamente tiene que ir al Senado. ¿Tenés alguna fecha?
-Saben que soy muy prudente con esas afirmaciones. Obviamente ya tuve algunos diálogos antes, durante la sesión y después de la sesión con respecto a los tiempos, pero me parece que vale la pena poner la bandera, el hito en el día de hoy, porque realmente lograr el consenso de los diputados nos llevó dos años. Y creo que hay que darle la importancia que tiene. Obviamente estamos en una Argentina que está discutiendo modelos. Hay una cuestión superestructural en la que hay muchos que creemos en la educación pública como un derecho, que tiene que ser gratuita, de calidad, y hay otros que hoy proponen un modelo distinto, de una Argentina para pocos y en algunos casos e incluso en una Argentina que desconozca su historia y piensa en el arancelamiento del sistema educativo argentino. Lamentablemente no me sorprende que haya un sector más radical de Cambiemos que, negando la realidad y la responsabilidad que tuvieron ellos cuando les tocó gobernar, hagan hincapié solamente en las cuestiones que faltan en la Argentina, no entendiendo la importancia de garantizar el derecho a la educación y la proximidad en ese sentido es fundamental. Y obviamente nuestro desafío es seguir trabajando para tratar de generar consensos. Muchas veces a la política se nos exige o nos piden que dialoguemos con la oposición o que nos pongamos de acuerdo en 5 o 6 políticas públicas para sacar el país adelante. Bueno, yo creo que la educación es una de esas políticas públicas en las que deberíamos estar de acuerdo. Ahora es muy difícil hacerlo cuando del otro lado encontramos irracionalidad o falta de argumentos, o la negación real de lo que significa para un pibe o una piba tener que trabajar y estudiar al mismo tiempo y a eso agregarle el traslado para llegar a la universidad. Hoy pongo en foco y resalto la posibilidad de generar consensos en la Argentina y obviamente generar consensos en Pilar y quiero destacar a todos aquellos que sí tuvieron la valentía de dejar de lado en una cuestión partidaria o una cuestión coyuntural por reconocer la historia y la tradición en la Argentina que es la educación pública gratuita y de calidad para todos.