Una contadora pública fue detenida en las últimas horas en Pilar, acusada de haber defraudado a la empresa donde trabajaba por más de 111 millones de pesos. La aprehendida fue denunciada por su exempleadora, la dueña de una empresa alimentaria del distrito, quien detectó irregularidades en las cuentas de su firma.
De acuerdo a la investigación, la contadora habría aprovechado su rol dentro de la empresa para realizar múltiples transferencias bancarias de montos millonarios a cuentas propias y de terceros, en una maniobra que se extendió durante al menos seis meses. Las operaciones se realizaron mientras la acusada se encontraba en funciones, y mientras la dueña estaba de vacaciones. Es que la propietaria dejó a cargo a la contadora de varias tareas sensibles, como el manejo de fondos y acceso a cuentas bancarias, habida cuenta del buen desempeño que mostró en sus primeros meses de labor.
Una parte significativa del dinero —más de 53 millones de pesos— fue girada a una empresa de San Pedro, cuyo vínculo con la contadora aún está bajo investigación. La maniobra delictiva salió a la luz cuando los dueños de la empresa notaron que había montos superiores a los acordados en la planilla de pago de personal.
Allí, la contadora, que debía cobrar un salario de 1 millón 600 mil pesos, aparecía con montos de entre 3 y 4 millones.
Si bien la contadora devolvió el dinero, y renunció a su cargo, luego se descubrió que la maniobra era mucho más grande que lo creído en primera instancia.
Tras radicar la denuncia, agentes de la SUB DDI de Pilar lograron dar con la acusada, quien fue aprehendida y puesta a disposición de la Justicia bajo la carátula de “Defraudación”.
Mientras tanto, los investigadores intentan determinar si hubo otros involucrados en la maniobra y cuál era el verdadero rol de la firma de San Pedro, que recibió varios millones de pesos.
La causa se tramita en la UFI N°3 de Pilar, que ya ordenó una serie de medidas para rastrear el destino de los fondos y establecer si existen más damnificados.